Nosotros nos tuvimos que conformar con ir al día siguiente, con unas condiciones no tan buenas para ver tornados, pero a priori interesante para ver un buen temporal.
Salimos de Málaga con pensamiento de cruzar la frontera portuguesa ya que el frente parecía que iba a pegar fuerte por esa zona, la misma que fue afectada por el tornado un día antes.
Tras unas 3 horas de viaje llegamos a Huelva, y aun nos quedaba algo mas para llegar a la frontera con Portugal.
En Ayamonte hacemos una parada, estamos justo a la frontera. El cielo es gris uniforme y discurren nubes bajas desde el mar. La humedad es notoria y el viento iba arreciando. Hacia el Noroeste es donde se ve el cielo mas oscuro, corresponde con unos chubascos mas intensos en el radar. De momento la actividad eléctrica es nula, pero esto debía de cambiar.
Pasamos la frontera y lo que nos encontramos era mas de lo mismo, un día muy opaco y oscuro pero no amenazaba tormenta. Llegamos a Faro , visitamos el pueblo y su puerto pesquero. Muy cerca del puerto este un río llegaba con el agua muy marrón y arrastraba sedimentos.
En otras zonas mas al oeste de Portugal la lluvia ya cae con intensidad, pero los rayos se quedan muy aislados y rezagados al Cabo San Vicente.
En la Praia da Galé, paramos para esperar la llegada del frente. El temporal es notorio, las olas saltan por encima de las formaciones rocosas de la costa, hacia el oeste el cielo esta muy oscuro y la lluvia ya cae a ratos con cierta intensidad en nuestra zona. Esta zona era espectacular con unas formaciones muy espectaculares.
Tras un rato de lluvia, decidimos dar por concluida nuestra visita a territorio portugues, así pusimos la directa hacia el este, para meternos de nuevo en territorio español, estábamos intentando ponernos por delante de la linea del frente. Poco antes de llegar al borde del frente, ya cerca de la capital onubense, un rayo nos deja un fuerte destello a nuestra derecha. A caído sobre el mar pero el trueno es fuerte. ¡Tenemos la primera tormenta del día!
No tardamos mucho en darnos cuenta de que estábamos ante un arcus, era momento de buscar buena posición, hicimos varias paradas y este es el resultado.
El arcus era inmenso, se perdía hacia el mar. Era un frente de ataque impresionante.
Un poco mas adelante, nueva parada. Desde aquí incluso grabamos un vídeo algo mas largo de la llegada del frente.
Tratamos de huir tirando mas hacia el este, al final buscamos un lugar donde poder observar la llegada del frente un poco mas al norte de la capital onubense. Desde un barrio muy humilde a la orilla del río tomamos las últimas fotografías del arcus.
La situación no dejó mas rayos y si un frente de lluvias que avanzaba muy lento por el oeste de Andalucía. Nosotros decidimos pasar la noche en un pueblo cercano a Cádiz capital, ya que se esperaba movimiento meteorológico al día siguiente.
En resumidas cuenta, fue un viaje que nos permitió conocer otros lugares del país vecino, pero que salvo la espectacularidad del frente o el temporal de olas, poco mas nos dejó interesante.
